Conocé a Belarus: post-punk oscuro e hipnótico desde Rosario
El lenguaje del post-punk es universal. A diferencia de otros géneros, enraizados en un localismo que evita su exportación o que no terminan de cuajar con las sensibilidades de otros países, los sonidos del after-punk se vienen expandiendo desde los 70s a nivel mundial con una proliferación que pocos otros estilos han logrado.
Cada nación tuvo sus exponentes, sus joyas ocultas y grupos legendarios. De la banda que grabó un EP y desapareció a la que se convirtió en referente de la camada, uno puede elegir cualquier zona del mundo y encontrar grupos que cultivaron los oscuros y atmosféricos sonidos del género.
Incluso al día de hoy, bajo el signo del revivalismo y la fusión con nuevas influencias contemporáneas, el post-punk sigue convocando la atención de cientos de bandas que sucumben a la tentación del bajo potente, las guitarras angulares y la estética existencialista.
Belarus, trío rosarino formado a fines del 2016, recuperan esta tradición pero saben que para destacarse, hay que trabajar. “En Argentina todo fue llegando más tarde y no se había explorado tanto ese sonido, por lo que aún hay mucho por descubrir en estos pagos”, cuentan, a la vez que resaltan su apego a la escena hardcore de los 90s y a grupos más contemporáneos.
Se trata de un cóctel de sonidos que ahora plasman en Piezas sobrantes (Remedio Casero Discos), su nuevo y segundo EP. La banda formada por Sebastián (guitarra y voz), Gonzalo (bajo y voz) y Alejandro (batería) explora a lo largo de seis canciones el post-punk más sombrío y deadpan con la confianza de quienes conocen el juego a la perfección.
Los amantes de la noche pueden agudizar los oídos: tendrán una nueva obsesión.
La banda tiene un estilo que mezcla lo oscuro del post-punk con otras influencias. ¿Cómo arribaron a este sonido? ¿Cuáles son las principales influencias?
Los varios cambios de formación que tuvo la banda generaron eclecticismo, y si bien tenemos un estilo bastante marcado, las influencias son amplias. Los tres venimos de la escena rosarina de hardcore punk de finales de los 90s y al día de hoy seguimos escuchando esos estilos. A la hora de componer, esa base está latente.
Por supuesto los clásicos del género siempre están presentes y el post-punk español hoy es una gran referencia para nosotros. También venimos escuchando mucho bandas actuales británicas, como The Murder Capital, IDLES o Shame, que tiene un estilo más visceral y reventado.
El sonido de hoy siempre fue el buscado. Creo que llegamos a un lugar, pero veremos para dónde vamos en el futuro.
El post-punk es un género que mantiene mucha vigencia, sobre todo a partir del revival que experimentó desde la década del 2000. ¿Qué es lo que creen que hace a estos sonidos no perder su poder? ¿Qué cosas nuevas hay por descubrir en el estilo?
En el resurgimiento del género apareció de todo: desde bandas para festivales masivos hasta otras un poco más interesantes. No sabría decir cuál fue la causa del revival, aunque en Argentina podría ser porque todo fue llegando más tarde y no se había explorado tanto ese sonido. Por esa razón queda mucho por descubrir en estos pagos.
Personalmente, me gustaría desempolvar las raíces “negras” del post-punk. Los negros siempre quedaron en el margen de todo y son los grandes protagonistas de la música popular. Lo percusivo, lo hipnótico; esa parte quisiera “descubrir” en lo que viene.
Acaban de editar Piezas Sobrantes, su nuevo EP. ¿Qué cosas notan que cambiaron respecto al primer trabajo de la banda?
El cambio es bastante notorio. Fuimos a la inversa: pasamos de algo más escuchable a un sonido más oscuro, además de los cambios de formación que mencionaba.
Al agarrarnos la cuarentena apenas terminamos de grabar, se fue demorando el lanzamiento: casi toda la etapa de lo que fue la mezcla y mastering fue vía mensajes; algo rarísimo e incómodo, pero no quedó otra.
También esta situación demoró la edición física en cassette, que vamos a sacar pronto por Remedio Casero Discos, el sello al cual pertenecemos.
Para este disco buscaron capturar la energía de sus presentaciones en vivo. ¿Cómo fue el desafío de trasladarlo al estudio?
El proceso de grabación fue muy distendido y divertido, gracias a Ignacio Molinos, con quien también grabamos el primer EP. Pusimos toda la confianza en él porque sabe lo que hace.
Al trabajar con él, esa tarea no fue tan difícil. Nacho es una persona del “palo”, así que por suerte entendió a la perfección lo que pretendíamos en el tema sonido: fuimos con seis canciones ya cerradas y con la idea de sonar de una determinada manera.
Es más, estamos convencidos de que si no le decíamos nada, el mismo iba a lograr el sonido que pretendíamos.
Las letras de las canciones son de momentos crípticas y traen a la mente imágenes sombrías en algunos casos y existencialistas. Además, el disco comienza con un sample de la película El Séptimo Sello, de Bergman, que le infunde un aura muy particular. ¿Cómo trabajaron estos elementos?
Por suerte las letras salen espontáneas; son imágenes que van presentándose y luego se les da una forma, una continuidad. Así y todo, generalmente nos sentamos y terminamos de redondear las ideas para que estas tengan un sentido y puedan quedar plasmadas.
Se nos ocurrió arrancar con el sample de El Séptimo Sello por una cuestión de que iba justo con el disco, con la estética, el concepto; hasta con el nombre del disco, jugar un poco con esto de que el ser humano ya casi es una “pieza sobrante” en el mundo. Buscamos plantear un existencialismo acorde a la vida moderna.
Además ya habíamos decidido que el tema que abra el disco iba a ser “El sello”, por una cuestión de nombre si se quiere, y por lo que plantea la letra, el inicio con parte de la obra de Bergman nos venía como anillo al dedo.
Aparte de demorar el lanzamiento físico, ¿de qué otras formas cambió su año la pandemia?
Al agarrarnos en plena post-producción y edición del disco, no hubo una presentación oficial. Teníamos planeada la presentación en vivo para fines de junio, pero por cuestiones obvias no se pudo, así que ahora estamos viendo de qué manera poder hacer algo como para poder tocar los temas grabados.
